Momento para despegar
Sin duda que lo vivido el sábado en el Estadio
El Teniente da pie para muchas lecturas. En primer lugar uno debe analizar
la disposición táctica de O’Higgins, una variación
total con respecto de todas las presentaciones anteriores de la “era Paez”.
A uno le resultaba extraño ver al Tati Medina como lateral, pensando
en su fuerza y entrega y asumiendo su carencia de recursos técnicos
para avanzar e irse en ataque.
A poco andar, se le debe asignar el mérito
a Páez, cuando el reconoce el error y varía el sistema (luego
de la lamentable lesión del Toro Caballero), Arredondo le dio una
tonalidad distinta a la salida por la derecha a falta de Miranda y Rivera.
No pueden quedar en el olvido las dos jugadas en
los goles de Concepción, desaplicación en el gol de Verdugo
y un penal claro de Medina para el gol de Pozo. Pero desde allí
se le debe asignar el justo reconocimiento del poderío de O’Higgins,
que nace del momento brillante por el que atraviesa Dinamarca. El Ligua
es de verdad un jugador para cuidarlo y venderlo bien. La claridad para
definir en el primer gol y esa visión de campo envidiable para meter
un pelotazo o un cambio de juego de 40 metros son características
que pocos jugadores chilenos pueden contar.
Además de ello, Tobar pisó nuevamente
el área y cuando llega a esa zona es un jugador preponderante. Que
lata le da a uno saber que se pierde año tras año un jugador
genial con la pelota, de buena pegada, de un físico envidiable...
Punto aparte, sin duda.
Subió Baltierra (ya era hora), mejoró
Carrasco, Darío en lo suyo, Christian Gálvez sin convencer
que es un jugador de primera, Armentia sacó dos pelotas muy buenas,
JUGÓ UN MINUTO Mario Salinas... Y el Tunga, qué gran jugador,
estuvo presente en dos goles, es un jugador realmente importante, qué
difícil es marcarlo....
Buen triunfo, más allá del show de
Cossio que esta vez desplazó a Guillermo Paez...
Nos vemos el jueves ante Coquimbo.
Por:
Waldo Andrés Correa
Periodista
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